miércoles, 7 de abril de 2010

Lo que pudo ser... Y se quedó en nada.


No, si ahora nos lamentamos. Un tal Lionel Messi arrasa en cada partido que juega, dejando a sus rivales en meros cadetes que más que participar en una competición oficial, forman parte de un amistoso entre cadetes y profesionales. Nos quejamos después de ver un par de hat-tricks y un poker de goles de ese pequeño gran hombrecito. Nos quedamos con la boca abierta cada vez que toca el balón y se va directo a la portería contraria. Y si eres portero, te recomendaría que cuando jugaras contra él, te pusieras bajo los pantalones unos pañales, porque sus envestidas pueden ser acojonantes.

Pero no quiero detenerme en su manera de jugar, puesto que no hay un ser en el mundo que no haya hablado de su estilo después de las últimas exhibiciones. Me voy a detener en un detalle que a algunos españoles a lo mejor no les suena. El 26 de Septiembre de 2005 el pequeño Lionel Andrés Messi jura la Constitución Española. Sí, señores. A todos los efectos era ciudadano español, pero en 2004 declinó representar a la roja, e irse a jugar con la albiceleste. ¿Qué hicimos mal?¿Quién tuvo la culpa? Quizás Messi tuviera lo que se llama "morriña", y no se sintiera del todo español, futbolísticamente hablando. O quizás, ningún ojeador de la Federación Española de Fútbol tuviera las luces como para ver que ese pequeño gran crack podía vestir los colores de nuestro país. No lo sé, la verdad. Me gustaría pensar que es lo primero, y que Lionel, con la humildad que le caracteriza, haya querido ser fiel a su verdadera patria.

Una pena. Con Messi, Villa, Torres,... ¿qué hubiera sido de nuestra selección? Tal vez hubiéramos ganado todo lo jugado. O tal vez no. Lo que sé es que todo el mundo se pondría a los pies de "La Roja" y eso da un gustazo que ni te imaginas. Sin embargo, nos vamos a quedar con las ganas. Los argentinos lo están disfrutando, y en competiciones como la de Sudáfrica lo tendrán a su favor. Nosotros los españoles, nos lo cruzaremos en la final, en el Estadio Soccer City de Johannesburgo, y ahí tendrá que demostrar de verdad, si merece la categoría de Dios, o la de futbolista.

Lio "el grande" se ha ganado un lugar en nuestros corazones. Aunque haya sido fiel a su patria desde un principio, lo que no debemos negar es que con su juego, la magia del deporte rey ya tiene dueño. Ahora mismo Maradona, Di Stefano, Pelé, Cruyff, Zidane... Los más grandes ven en peligro su reinado. Él es el mejor jugador del mundo en la actualidad. Y aún tiene 22 años.

Y repito, por desgracia, la Real Federación Española de Fútbol y sus técnicos y ojeadores tuvieron la oportunidad de convocarle para las categorías inferiores de España. ¿Lo hicieron? Lo cierto es que aquí en la llamada "piel de toro", disfrutaremos al "Messias" durante muchos años, y eso no hay nada que lo pueda comprar. El fútbol se hizo hombre, y habitó entre nosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario